Gestión histórica del agua en Perdiguera

1 abril 2022

REDACCIÓN

La gestión del agua en Perdiguera a lo largo de la historia, el uso y cuidado de sus infraestructuras, la reglamentación y las restricciones en época de carestía constituyen el objeto del cuarto y último artículo de Costán Escuer sobre el agua en Perdiguera.

En momentos de sequía el primer paso era reservar agua para el consumo doméstico. Escuer cita y transcribe parcialmente numerosas disposiciones tomadas al respecto a lo largo del siglo XX. En ocasiones se adoptaban medidas para racionar el agua, de lo que también cita varias instrucciones municipales.

Cuando la sequía continuaba se echaba mano de las creencias y la religión: rogativas, misas, novenas, recorridos procesionales, incluso con la imagen de Santa Beatriz, la patrona de Perdiguera, de los que queda constancia en la documentación por los pagos al párroco por prestar estos servicios.

Claro que mientras llegaban las lluvias había que conseguir agua por otros medios. Para épocas anteriores al siglo XX no se dispone de referencias a estos medios, pero hay que suponer que aparte del uso que pudiera hacerse de algunas fuentes salobres, los vecinos deberían desplazarse con cubas a municipios que disponían de acequias. En cuanto empieza el siglo XX se encuentran testimonios documentales de estos transportes, así como peticiones de suministro de agua dirigidas al Gobernador Civil y a la Diputación Provincial. Todo cambia cuando en 1976 llega, por fin, el abastecimiento de agua corriente desde el Gállego.